jueves, 29 de febrero de 2024

Imagine Dragons, una banda con futuro

Muy buenas a todos

Hoy vamos a hablar un poco de música y concretamente de una banda que hemos tenido la suerte de ver en directo dos veces en los últimos años, concretamente en Madrid en abril de 2018 y en Santiago de Compostela en julio de 2022. 

Imagine Dragons, una banda de pop-rock-indie que a buen seguro conocéis muchas canciones y para mi van a ser mas populares en un futuro. Así que id apuntando el nombre jejeje.  


Era en junio del año 2017 cuando la banda de Las Vegas decidía dejarnos con la miel en los labios con un pequeño showcase de su nuevo trabajo Evolve en el Teatro Barceló de Madrid. Con temas como Believer o Thunder nos prometían una nueva visita a nuestro país mucho más pronto de lo que nos esperábamos. Y así fue. El pasado 6 de abril Imagine Dragons aterrizaba en Barcelona y el 7 de abril en el WiZink Center de Madrid con su Evolve Tour. Una fecha que llevaba más de cuatro meses con el cartel de entradas agotadas para mas de 35000 personas (nosotros conseguimos las entradas en octubre si no me acuerdo mal...)

En el WinZink
Con colas desde las cinco de la mañana para ocupar las primeras filas, el antiguo Palacio de los Deportes estaba a rebosar de fans de todas las edades. Nosotros habíamos conseguido las entradas en la parte de arriba del Palacio, donde se veía como estaba lleno el pabellón. 

Comienza el show. 21:15 de la noche, y con la adrenalina con la que nos había dejado K. Flay, el público coreaba ya a pleno pulmón para hacer salir a la banda. Y aquí es donde empezaba la marcha. I Don´t Know Why abría la noche con un Dan Reynolds que no tardó en quitarse la chaqueta. Daniel Platzman introducía el tema a ritmo del bombo que ya hacía saltar a todo el público y que ponía el primer broche de oro con un primer confeti que volveríamos a ver en otro temas. Era el turno de Wayne, que introducía Believer desde un tono más relajado con el que ya se ganaba al público cantándola a pleno pulmón y tras la que Dan nos dedicaba unas palabras de bienvenida. “Dejad todo el odio fuera, porque aquí dentro no tiene cabida. Es una noche en la que celebramos el amor, la paz, la felicidad y la igualdad”, pronunciaba con la bandera del colectivo LGTBI+ al hombro.

Vivir es fácil con los estribillos asegurados. Las garantías son máximas al respecto en la factoría de Imagine Dragons y los estándares de la manufactura, muy apreciados por una amplísima parroquia. No faltan estallidos agudos, ascensos épicos, puños en alto, grititos y onomatopeyas. Cuanto más, mejor. Los de Las Vegas no solo quieren ser grandes, sino grandiosos, y su espectáculo de esta noche en el WiZink resultó arrollador en todo: un espléndido sonido que podría tirar tabiques abajo, explosión de confetis ya en la primera canción (I don't know why), cañones de humo con la segunda (Believer) y una bandera arcoíris antes de la tercera en los hombros del líder, Dan Reynolds, tan 'enrollao' que quiso cantarle el Cumpleaños feliz a su bajista.

Con este, cogíamos fuerzas para la ya bien famosa coreografía que daba a paso a uno de los temas más reconocidos de toda su carrera: It´s Time, que arrancó un poco lenta para ir subiendo de ritmo poco a poco para explotar en confeti y cañones de humo. Sin necesidad de pedir ayuda para cantar, el WiZink Center se venía muy arriba mientras decidían fusionar este tema con el siguiente. Paso para Gold, canción en la que el escenario de tenía de lunes doradas y amarillas reafirmando el título de cesta.

Pero todo no iba a ser energía por doquier. Era hora de bajar un poco el ritmo e iluminar todo el palacio de linternas mientras coreaban la ya famosa Three Little Birds del gran Bob Marley. “Don’t worry about a thing ‘Cause every little thing gonna be alright” se convertía en ese momento en un himno para los cientos de personas que estuvieron allí para disfrutarlo. 

Dan Reynolds For President!! Whatever it takes rompía con la dulce melodía para volver a una velada más marchosa y con sus característicos beats bajos los bombos y tambores. I’ll Make It Up to You, Mouth of the River y Yesterday seguían con esta energía que en ningún momento iba a decaer, y Dan daba paso a un momento algo más cómico con sus fans, enseñándonos como ya es clásico, sus magníficos dotes del manejo del español con los primeros versos del famoso poema de Pablo Milanés. “Yo soy un hombre sincero, de donde crece la palma, y antes de morirme quiero, echar mis versos al alma” – recitaba Danielito, como le gustaba a él hacerse llamar en español.

Todo es felicidad y énfasis en una noche efectista pero irreprochable, abonada al Citius, altius, fortius y con un jefe de filas dispuesto a dejarse el pellejo sin asomo de mesura: enseguida se deja toquetear por los espectadores de las primeras filas, erigido en mesías musculado con tirantes, y a mitad de faena se descamisa a sabiendas de que su tipito bien lo merece.

Start Over daba paso a otro de los discursos inspiracionales de la noche en la que nos quedaba claro que Dan Reynolds candidato a presidente: “Hace años estaba sentado con una terapeuta para superar una depresión enorme por la que estaba pasando. Está muy mal visto que la gente pida ayuda cuando tiene problemas que van más allá de lo externo pero yo no tuve miedo y lo dije desde el principio. Sé que aquí hay muchos de vosotros que podéis estar pasando por algo similar a lo que yo pasé. Pedid ayuda. Sólo quiero que sepáis que no estáis solos, que hay gente que os quiere y que hay razones por las que vivir y merecéis vivir”. Y así Reynolds nos presentaba el mensaje que llevaba estampado en Demons. Reynolds le canta a Bob Marley mientras miles de linternas ondean en su honor, pero también tiene las santas narices de revelar que sufrió de depresión y animar a las millones de personas que la padecen a combatir esos demonios (Demons) junto a sus seres queridos.

Rise Up daba paso a un reconocido y ya muy famoso On Top Of The World, con el que nos uníamos a una enorme fiesta con globos gigantes que caían del techo. De ellos nos despedíamos por un momento de la banda que aparecía en un pequeño escenario en mitad del WiZink Center para poder ver mejor a sus seguidores y tocar algunos temas en una versión más acústica. Next To Me ayudado por dos cellos y un violín, mejoraban la versión original del tema y I Bet My Life, con la que pudimos disfrutar de una miles de luces prendidas por todo el público durante estos temas, pero había más, pues las primeras estrofas de Warriors daban paso a un emocionante Bleeding Out que ponía la piel de gallina a más de uno y nos hacía estar en silencio bien atentos escuchándoles.

Imagine Dragons dandolo todo
El grupo K. Flay se unía con un fantástico rap a Thunder, uno de los numerosos himnos de la banda, con el que nos dábamos cuenta de que desgraciadamente el concierto estaba en llegando a su fin, pero eso no quitaba que nos quedaran temas para darlo todo. Walking The Wire bajaba un poco las revoluciones de la noche para volver a subirlas por todo lo alto: Radioactive. Más de siete minutos de canción con la que tanto Imagine Dragons como todos sus fans se dejaban los pies y la garganta saltando y gritando letra a letra el éxito con el que la banda saltó a la fama. Con esta demostraban que tras más de dos horas de concierto, la voz de Dan Reynolds y su sonido seguía estando al pie del cañón como en el minuto uno de haber comenzado.

En definitiva, un gran concierto el de Imagine Dragons. Un equilibrio casi perfecto entre su show de bombos y tambores que caracterizaban sus inicios y la impecable calidad musical que nos hicieron disfrutar durante casi dos horas y media de espectáculo. Un Dan Reynolds que sobresalía por su carisma y su cercanía hacia un público que se ganaba casi incluso antes de salir. Ya han prometido una vuelta a los escenarios españoles incluso antes de irse porque el cariño de España es algo muy especial que quieren seguir cuidando y disfrutando, decían estos. Una montaña rusa de éxitos y temas algo menos conocidos pero donde el resultado fue una velada con una sonrisa de oreja a oreja en la que la lluvia no les iba a hacer parar de gritarle a todo Madrid “You make me a believer”.

La baza de la empatía multiplica el efecto de una ecuación por la que asoman The Killers, Coldplay, U2 y cualquier cosa que suene a pop enfático de los ochenta. A este paso, los Dragones no tardarán en reventar un estadio español. Al tiempo.

Setlist Madrid 7 de abril de 2018






























Posteriormente les volvimos a ver en Santiago de Compostela en julio de 2022

El Monte do Gozo de Santiago de Compostela vibró en una noche calurosa al ritmo de la banda estadounidense Imagine Dragons, que ha desatado la locura entre los más de 30.000 asistentes que han presenciado sus grandes éxitos, en un directo impecable y festivo, con pirotecnia incluida.

A pie de escenario
Los de Nevada han actuado en la capital gallega en el que ha sido su único concierto en la Península Ibérica, fuera de festivales, tras participar el fin de semana pasado en el Mad Cool, en Madrid, y en el Nós Alive, en Lisboa. La banda ha demostrado seguir siendo todo un referente del pop-rock mundial en una cita "única", que forma parte de su gira World Mercury Tour y que muchos gallegos no olvidarán en mucho tiempo, dada la grandilocuencia del espectáculo, encabezado por Dan Reynolds.

El carisma de Dan ha llegado hasta el último rincón de un escenario dispuesto a celebrar la música, la vida y, como no podía ser de otra manera, el año Xacobeo -promotor del concierto junto a Sweet Nocturna- que en su extensión a 2022 y, tras lo más duro de la pandemia, ha decidido poner toda la carne en el asador. 

Los más de 45 millones de discos vendidos desde su nacimiento en 2009 y sus cinco álbumes de estudio avalan a una banda que ha desplegado una fiesta en la que no han faltado confeti, chorros de vapor y hasta incluso pirotecnia, para goce de los asistentes. Aunque la banda ha llegado a Santiago con un larguísimo álbum doble recién estrenado, Mercury -la primera parte fue lanzada en septiembre del pasado año y la segunda parte hace tan solo diez días- lo que más ha resonado han sido sus temas más triunfales, sus grandes éxitos. Esos para los que los asistentes han sido previsores, ocupando los espacios del Monte do Gozo desde bien entrada la tarde, para así poder coger sitio y escuchar himnos como Radioactive, Believer o It's time.

Inicio del concierto
Tras el concierto de la cantante viguesa Dani y la banda Mother Mother -que gira con los estadounidenses-, muy puntuales, Imagine Dragons ha arrancado a las 22.00 horas con su tema It's time, que el público ha recibido con los brazos abiertos. Poco ha tardado Dan Reynolds en seguir contentando a los asistentes, con el himno Believer, de su álbum Evolve, con el que se ha movido danzando por el escenario, entre chorros de vapor. "Esta noche es para vosotros, disfrutad de ser libres", ha exclamado Reynolds, que ataviado con una camisa azul y bermudas se ha arrodillado ante el público y ha expresado a sus fans su "gratitud".

La adrenalina inicial ha dado paso a la calma, con los temas Polaroid/Hopelss Opus, con el que el público ha hecho la ola; Thunder, que ha hecho saltar de nuevo a los asistentes, y Amsterdam, que ha sido coreada. Tras ellas volvió a coger carrerilla con el tema Shots, uno de los clásicos de la banda. 

"La música es mi vida, es lo que me mantiene vivo. Esta canción es para vosotros, para que os aceptéis, para que os améis a vosotros mismos", ha señalado Reynolds, tras el tema Birds, que ha iluminado el recinto con las miles de luces de los teléfonos móviles.

Prensa al día siguiente
El guitarrista Daniel Wayne Sermon, el bajista Ben McKee y el batería Daniel Plantzman han acompañado con virtuosismo la voz de Reynolds, que antes del descanso destrozó su camiseta, seña de la energía que ha desplegado sobre el escenario. Tampoco han faltado los audiovisuales, con imágenes que lanzaban mensajes de paz, amor y aceptación, marca de la casa, y detalles como el bajo, de los colores del colectivo trans, o los micrófonos y auriculares de la banda, de los colores de la bandera LGTBIQ.

Tras Follow you, la banda ha entonado Lonely: "¿Os habéis sentido solos alguna vez? No será hoy. Hoy somos una familia", ha expresado Dan Reynolds con una gran estallido de jubilo entre el público.


Natural ha cerrado con vítores y un gran aplauso la primera parte de un concierto, que después, en su tramo central, ha deleitado con la balada Next to me, el country Bet my life o exitos antiguos como Forever Young (Alphaville cover) -que han dedicado a Ucrania-, para continuar con la tranquila One Day, subir de nuevo el ritmo con la movida Whatever It Takes, bailar un poco de funky con It's Oky y finalmente cerrar con una versión de piano de Demons, tras sacar a relucir la bandera LGTBI.

Ya en su recta final, Enemy ha desatado la locura. En caliente le ha seguido Bones, continuando con la balada reivindicativa de la historia de amor de Dan con su mujer e hijos de Walking The Wire (para mi una de sus mejores canciones), iniciando el final con el hit de Warrior, en un concierto que ha cerrado con el más sonado de todos los éxitos de Imagine Dragons, Radioactive, con el subidón total de todos los presentes y que a la salida del recinto, el público aún canturreaba feliz.

En lo mas alto

Setlist Santiago de Compostela 11 de julio de 2022

It's Time

Believer